En esta época que nos a tocado vivir, nos vamos a encontrar con varios males relacionados con la salud mental son la ansiedad, el estrés y la depresión.
La ansiedad es una respuesta del organismo al percibir una amenaza o peligro. Es la manera en la que tu organismo te prepara para escapar o luchar ante un problema e incluso, llevada al extremo puede originar ataques de pánico.
El estrés es también un mecanismo de defensa del cuerpo ante una demanda, normalmente externa.
La depresión es un trastorno emocional que causa un sentimiento de agudo de tristeza , una actitud constante y una pérdida de interés por las actividades diarias de nuestra vida. Este tipo de trastorno afecta a los sentimientos, a los pensamientos y el comportamiento de una persona, y puede causar una variedad de problemas físicos y emocionales.
El aumento de este tipo de trastornos es una tendencia que va en aumento en las sociedades occidentales. El consumo de psicofármacos, principalmente de tranquilizantes y somníferos, se utilizan fundamentalmente para aliviar los conflictos, dolores o tensiones personales del paciente.
En la mayoria de los casos se comienza el consumo de psicofármacos bajo prescripción médica, por algún tipo de problema pasajero. Pero su uso inadecuado, excesivo o falto de control médico produce tolerancia y dependencia.
El uso prolongado de los Psicofármacos o pastillas, pueden producir alteraciones permanentes relacionadas con la memoria y limitaciones afectivas, entre otros. El daño cerebral puede ser similar al de los pacientes con adicción al alcohol.
Cuando se consume de forma abusiva o se realiza un consumo sin supervisión responsable, el problema es que no se pretende tratar un problema de salud. Sino un problema de bienestar. Por lo que no se busca curar una enfermedad, sino subsanar una inadaptación o incomodidad.
Desintoxicación de pastillas
Los psicofármacos están a la orden del día, se consiguen fácilmente y las personas creen “controlarlas”. Pero en muchos casos no es así y se necesita de ayuda para poder desintoxicarse de las pastillas.
Para la desintoxicación de pastillas, hay que dejar su consumo poco a poco ya que de lo contrario puede provocar un síndrome de abstinencia grave que suele aparecer bastante pronto y que tiene que ser objeto de control médico.
Normalmente los efectos suelen ser agitación, ansiedad, insomnio, agresividad, síndromes confusionales e incluso convulsiones. Es por ello que el proceso de desintoxicación suele conducirse a través de reducciones progresivas de la dosis utilizada y su sustitución, en caso necesario, por otros fármacos.
Si crees que tienes problemas con Psicofármacos y necesitas ayuda para la desintoxicación de pastillas, nosotros podemos ayudarte a lograr la estabilidad en tu vida. Donde tu seas el principal protagonista!!